24 de Octubre: Día Mundial de la Lucha contra la Poliomielitis

Este día fue establecido por el Rotary International hace más de una década para conmemorar el nacimiento de Jonas Salk, quien dirigió el primer equipo para desarrollar una vacuna contra la poliomielitis.

La poliomielitis es una enfermedad muy contagiosa causada por el Virus Polio (Picornaviridae, Enterovirus) que invade el sistema nervioso y puede causar parálisis en cuestión de horas. Uno de cada 200 infectados desarrollará parálisis flácida aguda (PFA) irreversible, afectando principalmente a los miembros inferiores y un 5-10% fallece por parálisis de los músculos respiratorios.

El virus se transmite de persona a persona, principalmente por vía fecal-oral y, con menos frecuencia, a través de un vehículo como el agua o los alimentos contaminados. La mayoría de los infectados son asintomáticos (72%) y en los que se presentan síntomas se observa fiebre, cansancio, cefalea, vómitos, rigidez del cuello y dolores en los miembros. Afecta sobre todo a los menores de 5 años.

Es una enfermedad que NO TIENE CURA, PERO ES PREVENIBLE CON VACUNAS. La aplicación de la vacuna antipoliomielítica (oral e inactivada) redujo dramáticamente la poliomielitis paralítica, transformándose en uno de los programas de salud pública más exitoso.

Para lograr la erradicación, es necesario que no existan casos por el poliovirus salvaje y tampoco casos asociados o derivados de la vacuna, para lo cual se debe reemplazar el uso de la vacuna SABIN oral (OPV por sus siglas en inglés), que contiene el virus atenuado, por la inactivada o SALK (IPV).

Es por esto que a partir de este año se cambió el esquema de vacunación que de un esquema secuencial actual de vacuna antipoliomilitica a un esquema completo con IPV o SALK, acercándonos un poco más a la erradicación completa del virus.

<< La vacunación es la mejor opción. >>